GUÁRICO/ La parroquia Espino del municipio Leonardo Infante, en el estado Guárico, se encuentra abandonada por las autoridades regionales y nacionales de Venezuela, con una carretera destruida en su totalidad, que ahora se convirtió en un camino real, la desatención de la ciudadanía que allí hace vida y servicios públicos deficientes son algunas de malas condiciones que viven a diario este gentilicio infantino.
En este sentido, en Guárico no se cuentan con vías de penetración en óptimas condiciones, créditos para la siembra de productores o combustible para los vehículos de los oriundos de esta localidad llanera.
Es así que la ciudadanía expresó que, «por acá no ha pasado ningún funcionario de la gobernación en años. El transporte público no puede ingresar y los habitantes de Espino están aislados. No podemos permitir que siga reinando la desesperanza y el olvido en los caseríos guariqueños de esta jurisdicción”.
Por otro lado, los campesinos se han quedado a la espera de recibir el apoyo gubernamental, esto con el fin de poder retomar las capacidades productivas y el crecimiento agrario de toda la zona de siembra de esta parroquia.
Mientras el gobierno nacional y regional solo se encarga de hacer múltiples promesas vacías, decir que harán y gastar cantidades multimillonarias en propaganda política demagógica, esto como mecanismo de persuasión para recibir apoyo popular mientras la realidad del pueblo guariqueño es otra en donde se hace predominante la incertidumbre y descontento ante falta de respuestas a problemáticas existentes en cada uno de las comunidades que conforman el estado.
Finalmente, en lo que respecta a Espino tenemos que es una parroquia agropecuaria por excelencia, la misma se encuentra en el oscurantismo social y político. Cabe destacar, que en esta franja llanera no se cuenta con un gobierno que acompañe a los productoresen la del queso, patilla, maíz, sorgo y otros rubros esenciales para el consumo de los hogares guariqueños que hacen vida en el lugar.