El Nacionalista

1 de mayo de 2024
00:51

Rafael Narváez:“Si el Estado sigue sin reaccionar seguirán muriendo trabajadores de la salud”

"Indiferencia del Estado ante el hambre y la pobreza del pueblo, es más letal que una bala perdida "

VENEZUELA / En opinión del abogado defensor de derechos humanos Rafael Narváez, a las autoridades venezolanas no les importa la pérdida de vidas por la COVID-19, ya que, según estima, “solo buscan el control político y para ello empujan a los ciudadanos a un proceso electoral en momentos en que la pandemia ha enlutado una gran cantidad de hogares”

En información ofrecida este lunes a medios de comunicación social, asegura el director de la ONG Derechos Civiles que “el Estado venezolano, por su irresponsabilidad e indolencia, continúa permitiendo que cada día mueran más médicos debido a la propagación del coronavirus”.

Advierte el activista humanitario que debe impedirse de inmediato que continúe la denunciada situación, en la que “hasta este jueves 27 de agosto habían perdido la vida en Venezuela por la pandemia unos 73 médicos, que junto a otros trabajadores del sector hace pasar de 100 el número de profesionales de la salud que han fallecido por el nuevo coronavirus”.

“Estamos perdiendo a nuestros trabajadores de la salud, a nuestros médicos y especialistas en diferentes áreas sin que el Estado reaccione y busque ayuda internacional para la donación de material de bioseguridad y de esa manera puedan protegerse del contagio y continúen atendiendo a los pacientes”, denunció.

Reiteró igualmente la denuncia en el sentido de que en la casi totalidad de hospitales del país los profesionales de la salud y paramédicos “no cuentan con la debida dotación de guantes, mascarillas y demás implementos para desempeñar su labor con una mayor nivel de seguridad”. Recordó en este sentido, que “ya antes de la llegada del nuevo coronavirus a Venezuela, la situación del sector salud era dramática por la falta de insumos, medicinas y equipos médicos y porque buena parte del personal de la salud ha emigrado a otros países buscando mejores condiciones de vida ante el estado de abandono en que ha caído el país”. Y se preguntó Narváez: “¿Cuantos médicos y trabajadores de la salud, deben morir por la covid-19 para que el Estado se conmueva?”

Finalmente cuestionó la actuación de los poderes del Estado, entre ellos al Gobierno nacional al TSJ y al CNE, en su afán de sostener el decretado Estado de Alarma y Excepción que “con la excusa de romper la cadena de contagio, solo ha servido para ejercer un control social violando garantías constitucionales y derechos humanos”.

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