La central sindical ASI Venezuela demanda un salario mínimo que alcance los $550 para cubrir la canasta básica, mientras empresarios y Gobierno debaten propuestas.
La central sindical ASI Venezuela renovó su exigencia de un incremento del salario mínimo que permita cubrir el costo total de la canasta básica familiar, valorada en más de $550. La petición, planteada en vísperas del Día del Trabajador, enfrenta posturas divididas entre sindicatos, empresarios y el Gobierno.
Leida Marcela León, presidenta de ASI Venezuela, advirtió que «no se puede seguir sacrificando a los trabajadores» y propuso financiar el ajuste con la producción nacional y la recaudación tributaria para evitar presiones inflacionarias. Sin embargo, por segundo año consecutivo, no hubo consenso en la mesa de diálogo entre Fedecámaras, Fedeindustria y el Ministerio del Trabajo.
Propuestas enfrentadas
Fedecámaras planteó un ingreso real indexado de $150 mensuales, mientras su presidente, Adán Celis, sugirió luego elevarlo a $200, pero manteniendo congelado el salario base. Por otro lado, ASI Venezuela propuso un aumento progresivo en dos fases: primero equiparar el valor de la cesta alimentaria ($377) y luego alcanzar los $550, incluyendo servicios básicos.
Además, el sindicato pidió mantener el bono de guerra y el cestaticket socialista, junto con compensaciones no salariales como un bono de transporte, recreación ($200) y fin de año ($200).
Emergencia laboral y derechos vulnerados
León denunció que desde 2018 las políticas laborales han significado un retroceso en derechos. «El salario es la vida de la familia venezolana, hoy empobrecida por la pobreza salarial», afirmó. Exigió al Gobierno crear empleos dignos, reducir la brecha entre salario y poder adquisitivo, y reabrir negociaciones de contratos colectivos.
La central sindical permanece atenta a los anuncios del 1° de mayo, mientras la crisis económica profundiza el descontento entre los trabajadores.