Una Corte de Apelaciones permite a Trump mantener tropas federales en Los Ángeles tras protestas. Gobernador Newsom denuncia ataque a la soberanía estatal.
El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, celebró este viernes que una Corte de Apelaciones le permitió mantener el control de la Guardia Nacional en California, tras una semana de protestas por operativos migratorios del ICE.
La decisión del Tribunal de Apelaciones del Noveno Circuito suspendió temporalmente un fallo previo que obligaba a Trump a devolver el control de las tropas al gobernador demócrata Gavin Newsom. El juez federal Charles Breyer había dictaminado que la federalización de la Guardia Nacional fue ilegal, lo que representó una breve victoria para el gobierno estatal.
Sin embargo, tres jueces del tribunal suspendieron ese dictamen, permitiendo que los más de 4.000 miembros desplegados sigan en funciones. Además, fijaron una audiencia para el próximo 17 de junio, donde analizarán los argumentos de ambas partes.
Trump reaccionó en su red Truth Social afirmando que “salvó a Los Ángeles” al enviar tropas para proteger edificios federales. “Si no hubiéramos actuado, la ciudad estaría en llamas”, escribió.
El despliegue comenzó el sábado pasado, cuando Trump movilizó a 2.000 efectivos tras las protestas provocadas por redadas en centros laborales. El lunes ordenó el envío de otros 2.000 soldados, ignorando la autoridad del gobernador Newsom y de la alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, quienes denunciaron la decisión como “una provocación innecesaria”.
Por otro lado, California presentó una demanda contra la Casa Blanca el martes, calificando la acción como “un ataque directo a la soberanía del estado”.
Tensión aumenta con nuevos refuerzos militares
Los Ángeles cumple su tercera noche bajo toque de queda y permanece fuertemente militarizada, pese a que muchas de las protestas han sido pacíficas. No obstante, algunas manifestaciones derivaron en saqueos y enfrentamientos con la policía y agentes federales.
El gobierno de Trump anunció además la llegada de 700 marines adicionales a la ciudad, a pesar de las objeciones de las autoridades locales. Hasta ahora, más de 350 personas han sido detenidas en el área metropolitana.
Las protestas también se han extendido a otras ciudades como Nueva York, Chicago, San Antonio y Seattle. En Portland y Nueva Jersey, agentes del orden dispersaron con químicos a manifestantes frente a centros de detención migratoria.
Mientras tanto, el gobernador de Texas, Greg Abbott, activó su Guardia Nacional ante posibles disturbios en su estado.
La escalada ocurre en vísperas del desfile militar por el 250 aniversario del Ejército estadounidense, previsto para este sábado en Washington y encabezado por el propio Trump. Se espera que ese día se realicen más de 2.000 manifestaciones en todo el país en rechazo a las políticas del expresidente.
