Caracas condena la nueva prohibición de visas de EE. UU. a venezolanos, señalando que busca fines políticos y representa una agresión directa.
El Gobierno de Venezuela rechazó este jueves la decisión de Estados Unidos de suspender la emisión y validez de visas para ciudadanos venezolanos. A través de un comunicado, la Cancillería calificó la medida como una “campaña de estigmatización” con fines políticos y de amedrentamiento.
Washington anunció la prohibición de ingreso a su territorio desde 12 países, incluyendo a Venezuela. Caracas respondió de forma categórica y denunció que la acción constituye una agresión sistemática contra su pueblo. La administración de Nicolás Maduro señaló que esta decisión forma parte de una ofensiva liderada por el secretario de Estado, Marco Rubio, a quien acusó de promover el odio hacia Venezuela.
Además, el Ejecutivo venezolano reafirmó su compromiso con la protección de los derechos de sus ciudadanos en el exterior. “Alertamos a la población venezolana sobre los riesgos de viajar a Estados Unidos, donde no se garantizan condiciones mínimas de respeto ni trato legal”, indicó el comunicado oficial.
Por otro lado, el Gobierno reiteró que este tipo de medidas no son hechos aislados, sino una muestra clara de una política exterior hostil hacia Venezuela. El texto también responsabiliza a sectores de la ultraderecha venezolana por respaldar esta ofensiva.
La decisión estadounidense ha generado preocupación entre ciudadanos venezolanos que residen o planean viajar a ese país. Mientras tanto, Caracas mantiene una postura firme de denuncia ante lo que considera una violación de derechos fundamentales.
La tensión diplomática entre ambos países continúa escalando. Las autoridades venezolanas aseguran que seguirán defendiendo su soberanía y la dignidad de sus nacionales frente a cualquier intento de exclusión o discriminación internacional.
