El presidente Daniel Noboa asumió su mandato en Ecuador por cuatro años, con promesas de seguridad, empleo y cooperación con la Asamblea Nacional
Daniel Noboa asumió este sábado la Presidencia de Ecuador para un nuevo mandato de cuatro años, en medio de un quiebre político que lo posiciona con una mayoría legislativa, aunque calificada por algunos expertos como inestable. Noboa gobernó previamente durante 18 meses en calidad de presidente interino, tras la salida anticipada de Guillermo Lasso.
Durante el acto de investidura en la Asamblea Nacional, el presidente del Parlamento, Neils Olsen, destacó la intención de mantener una relación de cooperación entre Ejecutivo y Legislativo. “El país nos exige estar unidos en lo esencial”, expresó.
Por su parte, el analista César Ulloa consideró este momento como un cambio histórico, ya que es la primera vez desde 2007 que el correísmo no lidera la mayoría. Sin embargo, advirtió que Noboa deberá fortalecer sus vínculos con las bases sociales para consolidar su liderazgo.
Seguridad, economía y respaldo militar
En el área de seguridad, Noboa reafirmó que continuará su “guerra” contra las bandas criminales, a las que declaró como grupos terroristas desde enero de 2024. Esta decisión se dio tras una ola de violencia que posicionó a Ecuador entre los países con mayor índice de homicidios en la región.
Además, presentó un proyecto de ley para garantizar indultos anticipados a policías y militares investigados por posibles excesos en el marco del conflicto armado interno. Según Noboa, su deber no es huir del conflicto, sino enfrentarlo con decisión.
Por otro lado, la economía sigue siendo otro reto clave. El desempleo preocupa a los analistas, quienes exigen medidas urgentes para generar nuevas oportunidades. Se espera que el presidente concrete pronto su gabinete, aplazado el sábado por temas de agenda.
Con mayoría parlamentaria y un discurso enfocado en orden y progreso, Noboa inicia su presidencia con grandes expectativas y presión social para cumplir lo prometido.
