A cinco años del inicio de la pandemia, el mundo aún enfrenta secuelas en salud, economía y sociedad. Descubre cómo ha cambiado todo.
Este 12 de marzo de 2025 se cumplen cinco años desde que la pandemia de COVID-19 transformó al mundo. La crisis sanitaria dejó huellas profundas en la salud pública, la economía, la tecnología y las relaciones sociales. Aunque se avanzó en vacunas y teletrabajo, las secuelas persisten.
Ildefonso Hernández Aguado, director del grupo de Investigación en Salud Global de la Universidad Miguel Hernández, destacó que, aunque inicialmente se gestionaron recursos estratégicos, hoy se han olvidado algunas lecciones clave. En una entrevista para el espacio Gladys en Éxitos, enfatizó la necesidad de reforzar la protección para grupos vulnerables, como personas con diabetes o consumidores de tabaco.
«Algunas pandemias actuales se deben a la pérdida de biodiversidad y al contacto con la naturaleza salvaje, lo que facilita la transmisión de enfermedades», explicó Hernández. Además, llamó a los países a implementar regulaciones más estrictas para prevenir futuras crisis.
Venezuela: preparación y desafíos
En Venezuela, la infectóloga pediatra María Graciela López resaltó la importancia de estar preparados ante nuevas contingencias sanitarias. «El COVID-19 nos dejó avances significativos, como el desarrollo acelerado de vacunas y plataformas tecnológicas», afirmó.
Sin embargo, López advirtió que la información confiable y las medidas preventivas siguen siendo elementos clave para garantizar la seguridad sanitaria. «Debemos aprender de lo vivido para no repetir errores», agregó.
Cambios duraderos en la sociedad
La pandemia aceleró la adopción del teletrabajo y la educación en línea, transformando la forma en que vivimos y trabajamos. No obstante, también exacerbó desigualdades y dejó secuelas en la salud mental. Organizaciones como Cecodap han alertado sobre el aumento de la intención de suicidio, especialmente entre jóvenes, tras la crisis.
Cinco años después, el mundo sigue enfrentando las cicatrices de la pandemia. Mientras algunos países avanzan en la reconstrucción, otros, como Venezuela, enfrentan desafíos adicionales. La lección más importante es clara: la preparación y la cooperación global son esenciales para prevenir futuras crisis.