El sector de las criptomonedas enfrenta una caída récord de $810.000 millones, impulsada por la desaceleración de políticas pro-cripto y robos históricos.
Los mercados mundiales de criptomonedas han perdido más de $800.000 millones en las últimas semanas, según datos de CoinMarketCap. Esta caída refleja el desvanecimiento del entusiasmo que surgió tras la victoria electoral de Donald Trump en 2024, cuando muchos esperaban políticas favorables al sector.
El bitcoin, la criptomoneda más grande, cayó un 3,6 % este miércoles, alcanzando los $85.600. En el último mes, sus pérdidas superan el 15 %. Otros tokens, como Ethereum y Solana, han sufrido caídas aún mayores, con descensos del 23 % y 42 %, respectivamente.
Los inversores esperaban que Trump implementara rápidamente reformas pro-cripto, como la compra de bitcoin por parte del gobierno estadounidense. Sin embargo, su administración ha actuado más lento de lo previsto. “La aplicación más lenta de las principales políticas a favor de las criptomonedas ha sido decepcionante”, afirmó Gadi Chait, gestor de inversiones de Xapo Bank.
Además, el lanzamiento de una memecoin por parte de Trump en enero generó críticas y contribuyó a la desconfianza en el mercado. El precio de este token cayó un 83 % tras un breve repunte inicial.
Robos históricos y salida de inversores
El sector también enfrenta desafíos de seguridad. La semana pasada, $1.500 millones en Ethereum fueron robados de la casa de cambio Bybit, en el mayor robo de criptomonedas de la historia. Este hecho reavivó las preocupaciones sobre la seguridad de los activos digitales.
Por otro lado, los inversores retiraron casi $1.000 millones de los fondos negociados en bolsa (ETF) de bitcoin el martes, según Bloomberg. Este éxodo récord refleja la creciente aversión al riesgo en el mercado.
¿Qué sigue para las criptomonedas?
Expertos como Matt Hougan, de Bitwise, señalan que el mercado está digiriendo el fin del boom de las memecoins. “Hasta que vuelva el interés institucional, la pérdida de dinamismo creará un lastre en el mercado”, afirmó.
Mientras tanto, grandes actores tradicionales, como los planes de pensiones de Wisconsin y Michigan, han comenzado a asignar fondos a bitcoin. Sin embargo, el camino hacia la recuperación sigue siendo incierto.