Panamá analiza enviar migrantes venezolanos a Cúcuta, Colombia, tras flujo inverso desde EE.UU. debido a la falta de relaciones diplomáticas con Venezuela.
El presidente de Panamá, José Raúl Mulino, anunció este jueves que el gobierno estudia las posibilidades de trasladar a migrantes venezolanos hasta la ciudad colombiana de Cúcuta, fronteriza con Venezuela. Esta medida surge ante el «flujo inverso» de migrantes que, al no poder ingresar a Estados Unidos, regresan hacia el sur del continente.
Mulino explicó que el envío directo de migrantes a Venezuela no es factible debido a la falta de relaciones diplomáticas entre ambos países. «Nosotros no tenemos contacto alguno con el Gobierno de Venezuela», señaló el mandatario durante su conferencia de prensa semanal. Sin embargo, destacó que están evaluando la posibilidad de volar a los migrantes desde Panamá hasta Cúcuta, desde donde podrían continuar su tránsito hacia Venezuela.
Además, Mulino informó que este miércoles llegaron a Panamá 119 migrantes de diversas nacionalidades deportados desde Estados Unidos. Estos migrantes serán alojados temporalmente en un hotel y luego trasladados a un albergue en San Vicente, provincia de Darién, fronteriza con Colombia. Las autoridades panameñas esperan retornarlos a sus países de origen lo antes posible, utilizando vuelos pagados por EE.UU.
Impacto en la región
La situación refleja los desafíos que enfrentan los países de la región ante el aumento del flujo migratorio. Por un lado, Panamá busca manejar la llegada de migrantes de manera ordenada, mientras que Colombia podría verse afectada por el posible aumento de personas en su territorio fronterizo.
El gobierno panameño continúa analizando las vías para gestionar este flujo migratorio, en un contexto donde las relaciones diplomáticas suspendidas con Venezuela complican las soluciones directas. Mientras tanto, Cúcuta emerge como una opción clave para facilitar el tránsito de los migrantes venezolanos de regreso a su país.