Álvaro Uribe se siente «honrado» tras ser declarado enemigo público por Venezuela, luego de solicitar una intervención internacional para destituir a Nicolás Maduro.
El 21 de enero de 2025, la Asamblea Nacional venezolana aprobó por unanimidad un acuerdo que declara a Uribe y Duque como «enemigos públicos y despreciables de la República Bolivariana de Venezuela». El documento señala que ambos exmandatarios forman parte de «un plan sistemático para atentar contra la soberanía, la paz y la autodeterminación del pueblo venezolano».
Llamado a intervención internacional
Esta declaración surge tras las recientes declaraciones de Álvaro Uribe, quien solicitó una intervención internacional en Venezuela, preferiblemente avalada por la ONU, con el objetivo de destituir al presidente Nicolás Maduro y convocar a elecciones libres. Durante un acto político en Cúcuta, Uribe instó a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana a cumplir con la Constitución y apoyar este proceso.
Respuesta del gobierno de Venezuela
En reacción a estas declaraciones, el presidente Nicolás Maduro ordenó a la Fuerza Armada y a los cuerpos policiales preparar y aceitar «los fusiles» ante lo que calificó como «amenazas criminales» de los exmandatarios colombianos. Maduro afirmó que se está preparando junto con Cuba y Nicaragua para tomar las armas en caso de una intervención extranjera.
La relación entre Venezuela y Colombia ha estado marcada por tensiones políticas en los últimos años. Las declaraciones de Uribe y la respuesta de la Asamblea Nacional venezolana reflejan el delicado estado de las relaciones diplomáticas entre ambos países. Además, la oposición venezolana continúa denunciando la falta de legitimidad en las elecciones que llevaron a Maduro a un tercer mandato, mientras que el gobierno venezolano acusa a figuras políticas colombianas de injerencia en sus asuntos internos.
