Los productores de queso de Venezuela, específicamente de Barinas, Guárico y Portuguesa, han iniciado una campaña por redes sociales.
Para exigirles a los dueños de bodegas, bodegones y abastos que reduzcan el precio del queso. En las fincas, el queso se vende a precios muy bajos.
El queso lo venden entre 5 y 6 dólares a pesar de que las granjas lo venden máximo en 1,5 el kilo.
Jennifer Rivero de Arismendi (Barinas) y Jonathan Pérez de Camaguán (Guárico) han intentado viralizar este llamado a los comerciantes finales.
«Ustedes deben buscar la manera de bajar los precios allá, para que pase este aboyo de queso y la gente en vez de comprar un kilo de queso compren dos», dijeron.
Dada la mayor producción de queso en esta temporada, consideran que el precio al consumidor debería ser menor.
Sin embargo, las consecuencias más graves recaen en quienes tienen las vacas lecheras y se dedican a la fabricación del queso.
En resumen, los productores de queso exigen a los bodegueros que bajen el precio para garantizar un equilibrio justo entre la producción y el consumo.
La situación actual afecta tanto a los productores como a los consumidores de queso, y es crucial encontrar una solución que beneficie a ambas partes.
